Del verbo analizar…

Día grande en el BOTXO, los leones dispuestos a afrontar el reto de superar a un MANCHESTER erigido en el último escollo en el camino para poder disputar una final que ponga a los de ERNESTO frente a la posibilidad de hacer historia. Simbólico además que sea el MANCHESTER de toda la vida el oponente a superar, por el amor histórico conocido y declarado de nuestro club al futbol de las islas de la GRAN BRETAÑA y porque está todavía muy reciente aquel momento mágico que vivimos en OLD TRAFFORD gracias a MARCELO y sus chicos.

Como todos los días grandes, el partido y la eliminatoria “se juegan” mucho más allá de los ciento ochenta minutos, prorroga mediante, de espectáculo sobre el césped, como todos los partidos grandes la previa y el post son parte de la “contienda”, parte del folclore popular que acerca al aficionado a este deporte, pero también parte muy importante de trabajo para los equipos y los cuerpos técnicos. Déjenme hacer algo de pedagogía acerca de como los cuerpos técnicos afrontan el análisis previo de un partido aprovechando la coyuntura.

El análisis de un rival es un proceso simple, aunque laborioso y muy alejado de los análisis que en otros ámbitos realizan aficionados, periodistas y también aquellos que hoy se catalogan analistas del juego del fútbol cual si de una ciencia exacta se tratase.

Digamos que el análisis de un rival pasa por un proceso de varias etapas hasta tomar forma definitiva, recogida de datos, información y material; análisis de estos; interpretación de probabilidades y finalmente elección de herramientas.

Comienza el trabajo con la imprescindible recogida de datos e información, la DATA que procede de GPS, las grabaciones de partidos del oponente, la recogida de información en el entorno del rival e incluso la opinión de “colegas” de profesión que aportan valor cualitativo en función del conocimiento y relación que tengan con el oponente aún cuando la objetividad de las opiniones por el mero hecho de ser personales, no por ser infundadas o faltas de capacidad, obliga a valorarlas con cautela. Esta parte del trabajo es ajena al primer entrenador, queda en manos del cuerpo técnico y es trascendental que ese trabajo se realice sin sesgo ideológico, labor del cuerpo técnico pasa por recabar información relevante, cuanta más mejor y aportársela al técnico, no por interpretarla, condicionarla u orientarla; donde si seguro que ERNESTO tendrá intervención directa será recabando información de sus “colegas” ¿Alguien piensa que en este trance no hay una llamada a ANDONI, PEP, EMERY o ARTETA? Yo desde luego llamaría a todos.

La segunda parte pasa por el análisis de esa información, ordenar lo recopilado, darle sentido y comprensión, entender lo que hace el oponente y como lo hace, detectar la esencia de sus comportamientos, sus estructuras fundamentales y desmenuzar desde el entendimiento de su escenario general mas favorable, los matices particulares en función de los nombres propios elegidos por el entrenador rival y de las mezclas propiciadas en dichas elecciones; Primero se define la globalidad y luego se interpretan los matices que van apareciendo; El desarrollo de este episodio guarda relación muy directa con el visionado de partidos, aquí ya hay quien decide, cuantos, como o contra quienes merece hacer el seguimiento y el visionado y nada y todo es verdad al mismo tiempo, ni nada ni todo garantiza el éxito. Aquí ya comienzan a tener un peso muy importante los entrenadores, aunque ya cada vez más, aunque yo discrepo, les llega la información mucho mas detallada, filtrada y concreta por su staff; Digo discrepo porque no estoy seguro si detrás del sesgo hay un intento de facilitar el trabajo o de hacer valer determinados lugares dentro de un cuerpo técnico, pero eso es lugar para otro debate, a mi particularmente me gusta recibir toda la información en bruto, ver todo y luego preguntar y cambiar impresiones, pedir opiniones, escuchar y recibir el sesgo, pero siempre habiendo tenido previamente una visión global de todo el escenario aunque eso aumente horas de dedicación.

El siguiente paso es trascendente, no siempre se da y aquí aun con la colaboración del cuerpo técnico el peso del entrenador es fundamental, en realidad el objetivo no es conocer y desmenuzar al rival, eso, sesgos incluidos, está al alcance de cualquiera, lo verdaderamente difícil y trascendente es ser capaz de prever lo que va a pasar, me explico, la información, el visionado y el análisis no tiene como objetivo definir que ha hecho el oponente o como se ha comportado, el objetivo consiste en ser capaz de “adivinar” como en el uso de esas herramientas y procedimientos el oponente se va a comportar frente a nosotros. Todo el mundo es capaz de ver como se comporta un equipo, pero muy pocos adivinar como ese comportamiento se va a expresar y va a impactar frente a ti cuando te enfrentes a el y ese es sin duda el quiz a superar, el reto al que se expone el entrenador. Cuando un equipo dispone de un tipo capaz de predecir con tino, acierto y garantía los escenarios, siempre plural, que va a tener que enfrentar tiene gran parte de la solución en sus manos, si entendemos por solución la capacidad de construir el escenario de comportamiento adecuado, no olvidemos que todo queda en “manos” de los artistas, de los “players”.

Si “adivinar” el futuro se antoja imprescindible, tan sólo estamos ante el paso previo al momento mas importante y decisivo que afronta el entrenador: Elegir a los artistas adecuados, procurar la mezcla de los mismos desde la ubicación de nombres propios eligiendo las herramientas/procedimientos adecuados para poder afrontar el escenario facilitando uno propio, genérico que permita a los futbolistas elegidos, en la espontaneidad, resolver la incertidumbre, de ahí que pensar que siempre los mismos “once” y dispuestos de la misma manera, pretendiendo hacer las mismas cosas repetidas de forma mecánica sea la más seria amenaza para la eficiencia en el rendimiento; En ese proceso elegir la forma en la que traslada la información al grupo y a cada individuo, proceso comunicativo tan complejo como detectar la necesidad en la que cada futbolista la demanda y cada grupo la admite, se antoja decisiva. Este reto obliga al ENTRENADOR a convivir con infinidad de variables que afectan su decisión y a convivir con la incertidumbre de otras que no está en su mano controlar, en el ejercicio final del análisis, el de la toma de decisiones, el ENTRENADOR afronta su máxima responsabilidad, en su mano en definitiva, está facilitar el mejor escenario al futbolista imaginando lo probable antes de que acontezca, por el camino también afronta la mayor amenaza, morir de EGO, pensando que los partidos se juegan en la pizarra, en los mapas de calor, en los cortes de video o en el dogmatismo táctico; Los análisis, los planteamientos, los planes…sólo cobran vida eficiente si se piensan para ser jugados, los partidos se deben prever para jugar confiando en el talento y capacidad de quienes juegan, los partidos por encima de todo se ¡juegan! Para que todo termine desembocando en el mismo lugar, colocar al futbolista en el centro de la escena y confiar en su capacidad, su inteligencia expresada intuitivamente y su destreza para resolverlo.

El MANCHESTER, el de toda la vida, visita SAN MAMES, en una cita imprescindible en el recorrido de una plantilla decidida a ponerse en un lugar que le permita hacer historia

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *