El rubio de Bermeo


No encontrarán equipo en la historia que haya construido leyenda sin el inevitable impacto de sus lideres, no encontrarán equipo en la historia que haya construido leyenda sin la presencia de especialistas en el juego, especialistas de la portería, especialistas en la dirección del juego en la línea “defensiva”, especialistas en el centro del campo y especialistas de talento gol.
La historia de hoy es la de un RUBIO DE BERMEO, nacido para liderar y para dirigir el juego del Athletic en la próxima década, un futbolista moderno lleno de antigüedades que recuerdan futbolistas de otra época, futbolistas de barrio, de campa, de futbol de calle.
Comprender a JAUREGIZAR, pasa a mi juicio, por la observación de cuatro rasgos que confluyen, se entremezclan y se funden para “modelar” la figura del RUBIO DE BERMEO.
RECURSOS: Estamos ante un futbolista con un amplio “cajón de herramientas” que le habilita un amplio “catálogo” de recursos para poder intervenir en el juego, la técnica individual propia del niño que se llevaba el balón al cole para hacer habilidad mientras se comía la merienda o que no desperdiciaba horas al día para dedicarle al juego en la forma que el barrio imaginaba en cada momento, suponen hoy el mejor aliado del LEON para poder resolver en la elite.
INTUICION: O dicho de otra forma, la forma rápida de expresar de forma práctica su conocimiento del juego, si algo caracteriza es su capacidad para “caminar” el campo por los lugares que el juego requiere en cada momento, detecta cuando acercarse a recoger la pelota en las primeras alturas cuando el juego se atasca en la salida, es capaz de jugar en diferentes alturas y en diferentes ejes con eficiencia ofreciendo lugares ventajosos de recepción y siendo capaz de resolverlos gracias a su nivel técnico, aporta ventaja con cada pase otorgando tiempo y espacio al receptor habilitándole mejores condiciones, no solo aporta ventaja al receptor también se la aporta al juego comprendiendo la intencionalidad necesaria en cada momento decidiendo cuando requiere seguridad o pausa y cuando vértigo, profundidad y riesgo, es capaz de llegar a lugares de gol con simpleza desde la irrupción de atrás o desde la llegada a zonas de chut, no se si existe futbolista con tanta capacidad para ganar rechaces y balones divididos en la frontal del área, acompaña los “ataques” por detrás para intervenir en el lugar correcto en el momento de la perdida aportando una garantía de seguridad para que los atacantes expresen su talento con libertad y los defensores no estén tan expuestos ante el espacio que manejan en su espalda, es el gran escudero del Athletic.
VERSATILIDAD: Al igual que la intuición, otra forma de expresar en la practica la inteligencia del juego, EL RUBIO DE BERMEO no responde a la definición de un perfil “enlatado” en una demarcación capaz de ejercer un solo rol o hacerlo de una forma concreta, JAURE conocedor de la globalidad del juego o del juego en sí mismo, idéntica los diferentes lugares por donde camina y expresa su juego de forma natural cerca de sus centrales, cerca de sus atacantes, sobre el eje central o sobre los pasillos interiores, un futbolista de todo el campo que se siente cómodo en cualquier lugar. No sólo es importante su capacidad de interpretar los lugares por los que camina, más destacable parece su capacidad para identificar como debe comportarse en relación a lo que le rodea, compañeros y oponentes, JAURE identifica como pocos, con intuición de campa y fútbol de calle, lo que requieren sus compañeros para expresarse y lo que solicita el juego en función de los comportamientos del oponente, adapta su respuesta a la necesaria espontaneidad que el juego, incierto y cambiante solicita.
SENTIDO DE PERTENENCIA: El chico es del Athletic, lo siente, lo llora, lo ama, jugar en SAN MAMES es su sueño, ganar con los del BOTXO su ilusión y lo expresa con pasión y con una casta que recuerda aromas de otros tiempos cada vez que enfunda la camiseta.
No existen en la historia equipos que hayan construido leyenda sin liderazgos ni especialistas, aquí tienen uno de los nuestros para los próximos diez años, EL RUBIO DE BERMEO.