Bilbao Athletic 2-1 Real Oviedo. Remontada para creer en la salvación

Celebración de uno de los goles | Foto: laliga.es

Celebración de uno de los goles | Foto: laliga.es

Era un jornada clave y el Bilbao Athletic acabó remontando un partido que se le puso cuesta arriba con un error de Yeray que aprovechó Toché. Lejos de suponer un mazazo para el equipo este gol espoleó a los cachorros que empezaron a carburar y hacer buen fútbol con dos futbolistas que marcaron diferencias en el encuentro de esta noche como son Ager Aketxe y Unai López.

Remiro evitó el 0-2 con una gran parada a disparo de Michel. Y pasada la media hora en una falta lateral perfectamente sacada por Aketxe la remataría de cabeza de manera inapelable Óscar Gil. Un minuto más tarde Seguín tuvo una clarísima ocasión.

En la segunda parte se vio a un Bilbao Athletic dominador con una clara convicción de darle la vuelta al marcador. Unai López y Aketxe obligaron a Rubén Miño a hacer dos destacadas intervenciones. Ruipérez Marín no vió un claro empujón sobre Guarrotxena que hubiera supuesta la pena máxima. Tan sólo Néstor Susaeta con buenos centros desde banda derecha era capaz de sacudirse el dominio local. A falta de un cuarto de hora Villalibre se plantaría sólo pero se encontraría con el poste. De la manera más inverosímil Seguín marcaría el gol de la victoria. Verdes dejó al Real Oviedo en los minutos finales con diez pero sus compañeros lo intentaron en jugadas a balón parado por fortuna para el Bilbao Athletic sin suerte.

Victoria que deja la salvación a seis puntos con el equipo muy vivo y creciendo cada partido. La próxima cita será de nuevo otra final ante un rival directo como el Llagostera.

Bilbao Athletic: Remiro; Jon Iru, Yeray,Óscar Gil, Saborit, Vesga, Unai López, Aketxe (Olaetxea´86)  , Guarrotxena (Córdoba´72), Seguín (Unai Bilbao´91) y Villalibre.

Real Oviedo: Rubén Miño; Fernández, Verdés, David Fernández, Peña; Erice (Linares´78), Néstor Susaeta, Míchel, Borja Valle (Hervías´57); Koné (Edu Bedia´57) y Toché.

Goles: 0-1 Toché´16. 1-1 Óscar Gil´36. 2-1 Seguín´76.

Árbitro: Ruipérez Marín (Castilla-La Mancha). Amarillas a Yeray, Saborit y Jon Iru en los locales. Amarillas a Toché, Edu Bedia en los visitantes. Expulsado Héctor Verdes´84.

Incidencias: San Mamés (6.580 espectadores).

Un comentario

  • GURIDI

    Los espectadores que ayer lunes por la noche acudimos, rodeados de aficionados ovetenses, a San Mamés, disfrutamos a base de bien del buen juego rojiblanco.
    Por fin se pudo ver un partido en el que se puede ganar, empatar o perder, pero en el que dando la cara y jugando con extremos y no con defensas laterales reconvertidos, se crean oportunidades y surgen las posibilidades de ganar el partido.

    Incluso empezando como es habitual con la mala suerte, que es fiel compañera de este Bilbao Athletic, las sensaciones son distintas. Otra vieja compañera esta temporada es la actuación arbitral que ayer siguió la tónica habitual con un árbitro que el día que explicaron lo de los penaltis faltó a clase y con un linier que se dejó olvidadas las lentillas en la nevera desde el día que explicaron el fuera de juego.
    El Bilbao Athletic entendió bien el criterio del árbitro y en el segundo tiempo salió mas fuerte, sabiendo que la actitud del castellano manchego era dejar jugar exageradamente.

    Buen partido en general de todos los chavales, desde un portero que evitó que el Oviedo matara el partido como lo hacen los buenos guardametas, hasta un extremo zurdo que no se desanimó porque no le salieron un par de regates al principio y tuvo la valentía de chutar y conseguir gol en un balón en el que lo fácil era volver a centrar al área pequeña para que los visitantes acabaran despejando.

    Ya llueve menos, aunque sigue diluviando. Allá a lo lejos, tras la tribuna norte, en dirección al Serantes se atisba un poco de claridad que puede que traiga una tregua en la lluvia y termine escampando.
    Veremos que tiempo hace el próximo fin de semana en la comarca del Gironés, donde el Llagostera que ha ganado 8 partidos en casa, los mismos que el líder, Deportivo Alavés, será un rival difícil pese a lo que apunta la clasificación, porque en su estadio sus números son buenos.

    Llagostera es tierra de paso. Esperemos que para el Bilbao Athletic también signifique un paso hacia adelante en esta temporada complicada.
    Lo merecen estos chicos tan jóvenes y lo merecemos también los aficionados rojiblancos. Espero y deseo que lo pensaran los cachorros, cuando al acabar el partido y los jugadores ovetenses se dirigían hacia la zona de la hinchada asturiana, fueron recibidos con una sonora pitada.

    Estos jóvenes jugadores rojiblancos que están buscando llegar a la meta, debieran pensar que detrás de ellos está empujando una afición diferente a todas. Como lo es el Athletic.
    Y que les merece la pena poner todo su esfuerzo para vivir plenamente esta experiencia.
    Porque cuando todo termine, y consigan o no sus objetivos particulares, esta experiencia, no se la podrá quitar nadie.

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